FutureSelf 11: El gran reset. Aprovecha Septiembre para volver.
Septiembre significa comienzo, inicio de una nueva temporada, el principio de un potencial por descubrir. Es hora de utilizarlo a nuestro favor.
Hablar de septiembre es hablar de inicios. De vuelta a la rutina, de ilusiones renovadas, de expectación por lo que llega y miedo por los retos a los que nos enfrentaremos. Septiembre nos abraza con orden y estructura, como si quisiera volver a encarrilarnos tras el caos y libertad de un agosto bien vivido. Y eso, si estás alineado con un propósito, con un deseo de construir, es medicina para tu cuerpo.
Puedes llegar a este mes arrastrándote, sin ganas, castigándote porque las vacaciones se han hecho muy cortas, porque tus vacaciones son la vía de escape a una vida que no has diseñado, que no te gusta y que no te representa. Puedes encarar septiembre como una oportunidad, como una manera de hacer borrón y cuenta nueva, de volver a conectar con lo que te apasiona y de pulsar un botón que te hará encontrar una vida en la que las vacaciones no sean tu huida, si no tu momento de recarga para seguir expandiéndote. Mi objetivo es que llegues a septiembre con esa actitud, llena de esperanza, power y potencial.
Ahora mismo estamos inmersos en FutureWaves, el programa que lancé hace unas semanas para establecer las bases de cara a que este septiembre sea un punto de inflexión en nuestra forma de afrontar los inicios, que estemos preparados a nivel mental para lo que viene, que tengamos una base y una estructura para afrontar todos los retos con ilusión y con las herramientas para aprovechar cada momento. Y una de las cosas que comentaba en mis transmisiones era el hecho de enfocarte en lo que realmente quieres y te interesa. Donde va el foco, fluye la energía. Como una planta que regamos a diario, la atención nos permite verla crecer, que genere raíces y que acaben brotando frutos en un tiempo. Pero necesita que tengamos nuestro foco en ella, al menos hasta que la base y la estructura estén bien afianzadas.
Al final, todo en la vida se resume en pactos. Pactos con tu pareja, con tu familia, con tus amigos, contigo… Algunos de esos pactos son orales, otros escritos, algunos son explícitos, otros… se dejan entrever. Los más importantes son los que nos ponemos cada mañana cuando nos levantamos, son las promesas que nos hacemos a nosotros mismos. Esos pactos con nosotros son los más dolorosos cuando no los cumplimos, porque nos decepcionan, nos frustran, nos hunden. No es el pacto en sí mismo, es la exigencia que le habíamos puesto a ese acuerdo. Es nuestro crítico interno diciendo lo mal que lo hemos hecho, lo perezosos que hemos sido o la cantidad de cosas que hemos procastinado. Yo digo no a los pactos, y sí a los deseos. Sí a crear oportunidades de conseguir lo que nos propongamos, a generar contextos que nos impidan caer en el autoboicot y que nos ayuden a avanzar desde las ganas, no desde el castigo o la exigencia.
Para ello, os comparto 3 técnicas que te ayudarán a volver a centrar tu atención en ti y lo que quieres construir. Son 3 herramientas compatibles e intercambiables entre sí, que utilizamos Mel y yo en nuestro día a día y que, bien aplicadas pueden cambiar el rumbo de tus semanas. No es lo mismo dejar tus semanas al azar, sumidas en la inercia, esperando a ser devoradas por fuegos que tendrás que apagar, y en las que no exista una intencionalidad detrás, que semanas llenas de foco, que te permitan sentirte realizadx con todo lo que estés haciendo, que te hagan sentir productivx, que avanzas y que utilizas el tiempo a tu favor. No es lo mismo. La motivación que te da el saber que estás en control de tus días, de tu tiempo, es algo que sólo se experimenta tras un día lleno de cosas hechas que te habías propuesto hacer. No por obligación, si no por ganas de avanzar, ahí radica la diferencia.
Time Blocking
La primera herramienta que os quiero presentar es la del timeblocking, seguro que la habréis escuchado alguna vez: reservarte espacios o huecos en tu calendario para aquellas tareas o acciones en las que te hayas propuesto avanzar. El timeblocking es un arte, y masterizarlo requerirá algo de tiempo. Saber cuánto tiempo te consumirá una tarea, o distribuirlas en tu calendario de tal forma que no te quedes corto ni te pases es algo que poco a poco irás calibrando. Por eso, te recomiendo empezar con una semana, y ver si es algo que funciona para ti. Esta herramienta puede ir desde lo más genérico (bloquearte 2-3 horas de foco en una temática concreta de tu trabajo o vida) hasta lo más específico (generar espacios de 20 minutos para tareas específicas e irlas tachando) y no existe una única solución.
A mí, por ejemplo, me funciona lo siguiente: el domingo, veo la lista de cosas en las que me gustaría avanzar esa semana, habitualmente corresponden al podcast y esta newsletter, a las redes sociales y a mis programas o clientes. Conociendo estos grandes grupos, me reservo 2-4 horas al día para cada uno de ellos, a veces FuturoPluscuamperfecto tiene hueco los lunes y martes, otras veces, pongo las reuniones y la creación de contenido para miércoles y jueves. Pero todo en bloques. Luego, dentro del bloque, en el calendario, ya añado las tareas específicas que me gustaría adelantar, pero dentro de cada bloque. Eso me permite tener, de un vistazo, una idea de cómo estará estructurada mi semana.
Pomodoro Focus
El método pomodoro es uno de los más sencillos y eficaces para conseguir adelantar y exprimir el tiempo. Lo utilizo desde la universidad y me ha ayudado siempre a organizarme mejor. Vivimos en un mundo realmente lleno de distracciones, en el episodio 11 de mi podcast ya os hablé del foco y el problema que tenemos con la atención a día de hoy, y es que el ruido nos impide avanzar en muchos aspectos de nuestra vida. El método pomodoro es una técnica muy guay para poder enfrentarnos a esos ladrones del tiempo que constantemente nos distraen. Es muy fácil: dedicas 25 minutos de tu tiempo a poner pura atención en una tarea, sólo una, sin distracciones ni multitarea, y 5 minutos a descansar, permitiendo en esos 5 minutos levantarte, tomar algo, mirar por la ventana o el móvil. Pero sólo 5 minutos. De cronómetro. Es más, se llama pomodoro porque el original es un temporizador con forma de tomate. Te vale el del móvil, en modo no molestar, por supuesto.
Me gusta utilizarlo cuando tengo que adelantar mucho, y veo que me voy por las ramas. Seguro que te ha pasado esto de estar en una tarea, irte al móvil a mirar algo que iba a beneficiar a esa tarea y acabar viendo los stories de tu cuñada haciendo un arroz el domingo. Esta técnica está para evitar eso. Para que tengas una excusa y un tiempo concreto y que te centres en acabarlo a tiempo. Al principio puede ser un poco duro, quizás necesites más módulos de 25 minutos porque no has calculado bien la dificultad de la tarea. No pasa nada, no desistas. Al cabo de 4 o 5 ciclos le habrás pillado el truco y será hasta divertido, porque serán mini retos para tu día a día.
El diseño de tus días
Esta me flipa. Sobretodo si eres de las personas que se motivan más cuando el nombre suena bien o cuando hay una temática detrás de algo. Es como ir a una fiesta de cumpleaños genérica: “¡Bienvenida a mi 28 cumpleaños!” o ir a una fiesta en Menorca donde todos vamos de blanco, los aperitivos están hechos con productos baleares y hasta la invitación huele a arena y sal, porque el cumpleañero es menorquín y quiere enseñarte sus orígenes. Cambia la cosa, ¿eh?
El diseño de tus días está pensado para salir de la monotonía, para darle una intención clara a tu jornada y para motivarte x100 cada vez que uno de ellos suceda. Puedes diseñar uno o varios días a la semana para que sirvan a tu meta o propósito, y tú decides absolutamente todo sobre el día. Eres un dios y la civilización que diriges es el tiempo dedicado ese día. Diseñar tus días te ayuda a poner máximo foco en cosas muy concretas, como el crecimiento de X cosa en tu trabajo, tareas administrativas, momentos creativos o de conexión con los demás. Te dejo ejemplos de algunos de los días que he diseñado durante el mes, por si te sirven de inspiración. Algunos se repiten semanalmente, otros mensualmente y otros cuando veo que es necesario.
El día Imperial. Un día pensado para enfocarme en actividades y tareas que me ayuden a expandir mi marca, mi alcance, mi crecimiento y mi visibilidad. Es el día de expansión de mi imperio.
El vortex creativo. Un día para dejar fluir las ideas, para que brote la creatividad, para unir puntos, para ver patrones en lugares que antes no había podido mirar por estar muy ocupado. Es un día de fluidez y de muchísimas nuevas ideas.
Money Talks. Citas con nuestra parte financiera, con el dinero. Momentos para ver cómo es mi relación con el dinero, como va, cómo lo hago crecer, cómo lo he invertido, etc
Esto son solo 3 ejemplos, pero la realidad es que puedes tener tantos como días de la semana. Si es algo que te interesa, dímelo y hago una edición especial o algo relacionado con eso.
Como ves, afrontar septiembre puede ser un acto de valentía o una oportunidad para cambiar la perspectiva, para empezar con fuerzas renovadas y para volver a ilusionarnos con todo lo que un día nos encendió una chispa en nuestro interior.
Nos vemos en el futuro,
Fabián
Me ha encantado lo del diseño de los días a mí también gordi, no lo había pensado nunca y tiene todo el sentido del mundo! Te lo copio ya mismo. Estoy disfrutando mucho de tu newsletter!! Esta tarde me pondré el podcast <3 gracias!!!
Que interesante las propuestas de diseño de días, me encantaría saber más ejemplos! 😊